Los términos “certificación” y “certificado” se utilizan regularmente de manera intercambiable, pero en el mundo de las acreditaciones hay diferencias muy definidas. Estas diferencias tienen importantes implicaciones para el cuándo y cómo invierte su empresa en programas de capacitación y validación. En la primera parte de esta serie, explicaremos el significado y las características de cada concepto. En la segunda parte, explicaremos como puede usted aprovechar cada tipo de acreditación para lograr sus objetivos.
Una certificación es un documento emitido por una entidad independiente certificadora, como IPC, para verificar que el individuo cuenta con ciertos conocimientos, habilidades y destrezas previamente adquiridas en un campo de especialización. Estos individuos usualmente requerirán presentar un examen para demostrar que poseen estas competencias a un nivel de competencia definido por normas o criterios establecidos por miembros de la industria. A los candidatos que completen satisfactoriamente el examen se les expide un certificado que acredita dicha certificación. El documento que se les otorga se llama certificado, y demuestra la obtención de la certificación correspondiente.
Las Certificaciones no están ligadas a un programa de entrenamiento en específico. De hecho, cualquier persona que cumpla con los requerimientos de elegibilidad de la certificación puede tomar el examen. Dada la rigurosa naturaleza de los exámenes de certificación, se recomienda siempre algún tipo de preparación ya sea formal o informal para la prueba.
Sin embargo, la preparación para el examen no es obligatoria ya que el examen no está diseñado para evaluar si un estudiante aprendió o no lo que le fue enseñado en un curso. Más bien, los exámenes de certificación están diseñados para validar y reconocer las competencias actuales de una persona. Esta es la razón por la que existen criterios de elegibilidad para las certificaciones. Los individuos con cierto nivel de educación y años de experiencia en el trabajo ya habían tenido la oportunidad de adquirir el conocimiento y habilidades que serán medidas por el examen. El papel del examen de certificación como herramienta de validación también explica por qué los estudiantes que participan en el examen no pueden ver las preguntas que fallaron, puesto que el examen perdería rápidamente su habilidad de medir las competencias correctamente si las preguntas y respuestas fueran del conocimiento general.
Por último, es importante abordar algunos conceptos erróneos sobre el proceso de desarrollo del examen de certificación. A pesar de la creencia popular, los exámenes de certificación no son creados por individuos al azar con la intención de hacer las preguntas tan difíciles o triviales como sean posibles. Como explican los autores de Developing Certification Exam Questions: More Deliberate Than You May Think, el desarrollar preguntas de examen que sean relevantes, confiables y justas – preguntas en las que los empleadores puedan confirmar que cierto empleado pueda verdaderamente llevar a cabo las tareas que les son asignadas – es necesariamente un proceso largo y sistemático que requiere la dedicación de expertos en la materia y una amplia evaluación estadística por parte de psicómetras experimentados (científicos que estudian la medición de los conocimientos, habilidades y capacidades de las personas).
Un certificado es sinónimo de capacitación. Los participantes del curso reciben un certificado de aprovechamiento o finalización al concluir con éxito un programa de capacitación que ha sido diseñando para enseñarles nuevos conocimientos y habilidades. A diferencia de los requerimientos educacionales y de experiencia necesarios para poder presentar un examen de certificación, la mayoría de los programas de entrenamiento están disponibles para una amplia gama de participantes. Sin embargo, en algunos casos los estudiantes requerirán completar cursos específicos como prerrequisito, antes de tomar cursos más avanzados del mismo tema.
Los programas de capacitación bien diseñados utilizan exámenes como una herramienta tanto de aprendizaje como de evaluación. Actividades de práctica, pruebas de conocimiento, y exámenes rápidos les permiten a los estudiantes evaluar su entendimiento y afinar sus habilidades, pero solo aquellos estudiantes que obtengan la calificación aprobatoria en un examen diseñado para verificar el aprendizaje serán acreedores a un certificado. De acuerdo con el Institute for Credentialing Excellence (Instituto por la Excelencia de la Acreditación), los programas de certificados basados en evaluación (ABC por sus siglas en inglés) son muy adecuados para ayudar a que los empleados adquieran habilidades específicas para realizar sus labores a un nivel de competencia definido por la industria. Desde luego, no todos los programas ABC son creados iguales, así que es importante considerar solo aquellos ofrecidos por organizaciones como IPC, cuyos especialistas del aprendizaje trabajan con expertos de la industria para asegurar la adquisición y transferencia de nuevos conocimientos prácticos al puesto de trabajo.
Los programas de certificados son sinónimos de capacitación y han sido diseñados para impartir nuevos conocimientos y habilidades. Los individuos que cumplen satisfactoriamente con un programa de capacitación recibirán un certificado de aprovechamiento o finalización. Este es semejante al diploma que un estudiante recibe al concluir la Secundaria. Los programas de certificación son sinónimo de un riguroso examen diseñado para evaluar la competencia de una persona en un campo laboral. Los individuos que aprueban un examen de certificación reciben un certificado de certificación. Es decir, un documento (certificado) que deje constancia de que la persona aprobó el examen (certificación). Esto es similar a aprobar el examen de la barra de abogados para poder ejercer la profesión de abogacía en una jurisdicción determinada.
Asegúrese de leer la segunda parte de esta serie de artículos en dos partes para saber más sobre cómo utilizar los programas de certificados y certificaciones para satisfacer las necesidades de su organización.